El Ayuntamiento de Almassora ha solicitado permiso al Ministerio de Agricultura para la plantación de nuevas especies en la senda de la desembocadura del Millars. De esta forma, completarán los 5,5 kilómetros de recorrido que separan la playa del casco urbano, tal y como informaron ayer fuentes municipales.

El área de Medio Ambiente se ha encargado de hacer efectiva esta petición, que se hace extensiva para el resto de anualidades, «que se irán concretando regularmente», según destacaron, y con la que se pretende potenciar el uso de este recorrido.

En el informe remitido al Gobierno explican que la colocación de una línea de árboles, con instalación de riego por goteo a lo largo de la senda, se está desarrollando por tramos y por ejercicios. De hecho, se da cuenta del inicio del proyecto, con la plantación de olmos y otras especies, que está prevista para la segunda quincena de enero del 2018.

Desde el consistorio inciden en que la finalidad principal de su propuesta es «dotar de más sombra el trayecto, en el tramo comprendido entre la costa y la población, para mejorar el paisaje y el entorno», detalla el texto.

INVERSIÓN // El pasado noviembre comenzaron las tareas, con una inversión de 10.000 euros, en 350 metros lineales junto al camino Marjalet para continuar con las labores ejecutadas el año pasado. Los técnicos apostaron por árboles de especies de gran envergadura, como álamos, fresnos, almeces, olmos, tamariscos y arbustos, con la idea de potenciar las zonas de descanso durante el verano en este espacio que se encuentra desprotegido del sol.

CALOR // Las altas temperaturas registradas hasta mediados de otoño obligaron a esperar hasta la llegada del frío para iniciar la intervención de la nueva fase. Ahora, el objetivo es que la nueva vegetación se adapte a un entorno cálido y húmedo.

La puesta en valor de este espacio natural forma parte del capítulo de inversiones que ha aprobado el Ayuntamiento dentro de su presupuesto del 2018.