La empresa encargada del control de plagas contratada por el Ayuntamiento de Almassora inició ayer las prospecciones de larvas de mosquitos, en previsión de la proliferación de las mismas tras la oleada de calor de los últimos días. Se trata de la primera revisión, realizada tanto en casco urbano como en la playa, para seguir la evolución de la especie desde los primeros días del año.

En el núcleo urbano las revisiones se centraron en imbornales. En el litoral se revisan acequias, charcas y puntos con agua estancada. Las labores comenzaron en Vora Riu y se extienden hasta el límite con el término municipal de Castellón. Los operarios extraen muestras de agua para descartar la presencia de larvas, que podría multiplicarse en el supuesto de producirse lluvias.

seguimiento // La compañía recordó que el seguimiento de la especie depende en gran medida de las condiciones atmosféricas, consideradas atípicas en este momento del año debido al calor registrado en los últimos días.

La concejala de Medio Ambiente, María José Tormo, señaló que el cronograma de trabajo variará en función de la estación del año y de la meteorología que, de hecho, está previsto que se ajuste a los parámetros del invierno este mismo fin de semana tras el calor de los últimos días. «El tiempo es uno de los factores que más impacto tiene», indicó.

Los técnicos desplazados esta semana hasta la playa de Almassora detectaron numerosas piscinas privadas con agua sucia al descubierto. Por ello, solicitan a los propietarios que tomen medidas para cubrir las balsas en invierno o tratarlas con productos especializados contra las plagas.

La colaboración ciudadana, inciden, será clave para que la campaña contra los mosquitos dé sus resultados el próximo verano. «La erradicación total no es posible, pero está en nuestra mano evitar la acumulación de agua al aire libre, además de los tratamientos de la empresa», según Tormo.