Los seis colegios de Almassora están a punto para iniciar mañana el curso escolar 2016-2017, tras una inversión en mantenimiento que supera los 60.000 euros. Entre las novedades para este ciclo figuran las pizarras digitales que estrenarán los alumnos del centro Santa Quitèria. A esta mejora de las prestaciones se suman toldos, pintura y reparaciones en el resto de edificios educativos para que el ejercicio arranque en las mejores condiciones.

La concejala de Educación, María José Tormo, ha agradecido al Servicio Municipal de Mantenimiento y Logística (SMML) “el esfuerzo realizado en los últimos días en colaboración con directores y conserjes para que todo esté a punto cuando vuelvan a clase los pequeños”. De hecho, todos los centros se han sometido a una revisión generalizada de electricidad, cerrajería y fontanería.

El regreso de los alumnos a las aulas coincidirá con una de las semanas más cálidas del verano, por lo que los toldos nuevos ayudarán a mitigar las altas temperaturas en centros como el Cardenal Cisneros, que ha renovado estas estructuras en las últimas semanas. Por su parte, el Regina Violant y el Santa Quitèria disfrutarán de los porches instalados en 2015 para proteger del sol. En otras escuelas se han mejorado puertas de patios, cambiado ventanas o pintado los edificios. H