El Ayuntamiento de Almassora iniciará, a finales de año, el Plan de Accesibilidad Universal, al que se comprometió en esta legislatura, con la mejora de la calle Boqueras, entre la avenida José Ortiz y la calle Caridad, con un presupuesto de 150.000 euros.

La Diputación Provincial aceptó el proyecto remitido por el consistorio para solicitar la subvención del Plan Castellón 135 de esta institución provincial. El objeto de la actuación es ampliar las aceras, eliminar las barreras arquitectónicas que impiden la movilidad de las personas con discapacidad y priorizar el paso de los peatones y ciclistas que circulen por este tramo vial.

La intervención // Los trabajos mejorarán las condiciones de accesibilidad peatonal en las intersecciones, modificarán el aspecto actual del vial y culminarán la señalización de la vía ciclista, que iniciaron en 2017 para potenciar el uso de la bici en este carril.

El documento redactado por los técnicos municipales detalla que la ejecución de las obras busca crear una configuración «más amable» con los peatones y pretende fomentar la movilidad urbana con la habilitación de un itinerario peatonal accesible.

El Ayuntamiento aprovechará los trabajos para renovar los distintos servicios afectados de esta zona, siempre y cuando su ejecución sea compatible con la actuación principal, como incorporar mobiliario urbano y jardinería en el espacio público o añadir nuevos puntos de alumbrado.

La intervención logrará la uniformidad de este vial para el acceso y salida de Almassora en una superficie aproximada de 2,2 kilómetros cuadrados. La señalización de este tramo se extenderá unos 300 metros cuadrados más.

La concejala de Territorio, Carmina Martinavarro, recordó que entre las pretensiones de la reforma se encuentra el incremento de la seguridad de la vía para todas las personas que hagan uso de este recorrido, especialmente de los peatones y ciclistas.