El departamento de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Almassora acumula 27 jornadas de tratamiento contra los mosquitos durante este año. En concreto, cinco de estas corresponden a los tres primeros meses del año, cuando la incidencia de la plaga es menor y los operarios vigilan la aparición de larvas; y otras 22 entre los meses de abril y julio, época de mayor afectación que requiere de revisiones continuadas.

Tal como reflejan los partes de trabajo de la empresa contratada por el consistorio, las intervenciones se distribuyen por todos los barrios del municipio, con mayor frecuencia en áreas como la playa, donde son más habituales los focos. También la Vila, el circuito de Darremur, las acequias, los colectores de la costa, la avenida Castellón, Pío XII, Pla del Calvari, Corell o los solares próximos a la avenida Generalitat han sido objeto de trabajos larvicidas con pulverización.

Las últimas acciones se produjeron el miércoles y jueves de la semana pasada, con sendos procedimientos en la playa, tanto en la zona de Vora Riu como en el tramo central y el norte de la costa. Imbornales, caminos, acequias y solares fueron algunos de los puntos donde se pulverizó para aplacar las molestias de los dípteros que proliferan en estas fechas tras las lluvias primaverales y la llegada del calor.

Cabe recordar que el Ayuntamiento de Almassora adelantó un mes este año el comienzo de los tratamientos y al detectar la existencia de larvas, en espacios con agua estancada, se comenzó a fumigar antes de lo habitual.