Tras la reunión informativa que el equipo de gobierno mantuvo con las asociaciones vecinales del distrito marítimo para abordar el retraso y paralización de las obras de regeneración, la alcaldesa, Susanna Nicolau, y la concejala de Urbanismo, Carmina Martinavarro, han traslado a los responsables del Servicio Provincial de Costas la quejas de los residentes en el distrito marítimo respecto al proyecto.

Durante el encuentro, al que asistió el jefe de servicio de Castellón, Fernando Pérez Burgos, el equipo de gobierno puso sobre la mesa la necesidad inminente de encontrar una salida a la paralización de las obras. "Faltan tres semanas para que finalice el plazo dado por Costas, ya que el 3 de marzo se extingue el contrato entre el organismo y la empresa concesionaria", ha recordado la alcaldesa. Martinavarro, por su parte, desea que "la solución adoptada permita retomar las obras de inmediato y evite acumular más retrasos".

En la línea de las peticiones vecinales, una de las preocupaciones que mantuvieron los propietarios del distrito marítimo es que los efectos de los temporales demuestran que las obras son insuficientes. Según explicaron, tanto el paseo Marítimo como las viviendas próximas a la primera línea de costa sufren las consecuencias del oleaje con la misma intensidad que antes de iniciarse las obras de regeneración.