El concejal de Obras y Servicios, Guillem Alsina, se reunió ayer por la mañana con el presidente de la Federación de Cofradías de Vinaròs, Salvador Oliver, a quien le explicó que “el comentario, totalmente desafortunado”, que realizó “sobre la escultura del cofrade, en ningún momento quería ser una falta de respeto a la Semana Santa”. En concreto, se refería a las a las declaraciones efectuadas en una tertulia radiofónica en las que comparaba la estatua dedicada a esta celebración con los personajes Batman y Robin.

Alsina también señaló: “Si una cosa he tenido clara siempre es que para que te respeten tus gustos o costumbres, primero, tienes que respetar los gustos y costumbres de los otros”. El encuentro terminó con un apretón de manos entre el representante socialista y Oliver.

Esta cita se produjo unos minutos después de la rueda de prensa que ofreció el presidente de la Federación de Cofradías. Un encuentro ante los medios en el que el representante de la entidad aludió a estas afirmaciones asegurando que “quizá fueron fruto de un momento de nerviosismo, pero han sido muy desafortunadas”. “Un concejal representa a todos los vinarocenses y debe cuidar estas declaraciones”, añadió.

La escultura en cuestión es obra del artista Jorge Díaz Fernández y se inauguró en el 2013. Tras sufrir actos vandálicos, se trasladó de la plaza San Agustín al pasaje de San Valente. H