Unas hojas de libreta, un bolígrafo y cinta adhesiva son los elementos empleados por un ciudadano anónimo de Benicarló, que ha emprendido una campaña personal contra las actitudes incívicas que muestran algunos propietarios de perros en las calles de la localidad. En sus escritos, repartidos en paredes de la vía pública puede leerse: “No ensuciéis la vía pública de meadas y cagadas de perros. Hacerlo (sic) en vuestra casa porque las puedes pisar. No seáis guarros”.

Los mismos carteles, repartidos por todo Benicarló, añaden a modo de recordatorio la multa que puede interponerse a los poseedores de animales, en el caso de que practiquen estas conductas incívicas, y que tiene una cuantía económica de hasta 500 euros.

Por el momento, se desconoce la autoría de estos escritos, elaborados de forma casera y en letras mayúsculas, que han sido colgados en diferentes puntos del casco urbano.

La polémica por las heces de los perros no es nueva en Benicarló. Hace una semana, el consistorio reabrió el parque canino, cerrado un año antes por no cumplir los requisitos sanitarios. La demanda de estos espacios es tal que el equipo de gobierno trabaja en otro para la zona del pabellón. H