Una avería en la red eléctrica dejó en la madrugada del sábado al domingo a 700 clientes sin luz durante siete horas. Tal y como informaron fuentes de Iberdrola a Mediterráneo, el problema se produjo a las 3.00 horas, afectando a 2.800 puntos de suministro. «A la hora y media ya se había recuperado el servicio para un 75% de los afectados», indicaron. Y añadieron que el resto debió esperar porque tuvieron que llegar dos grupos electrógenos. Además, al afectar a un cable subterráneo, tampoco pudieron empezar a trabajar en el mismo momento para evitar molestias a los usuarios en plena noche.

La alcaldesa, Estíbaliz Pérez, manifestó que «la preocupación del equipo de gobierno sobre los apagones es máxima». «Por ese motivo, me he puesto en contacto con representantes de la empresa en la provincia para tratar de solucionar el problema existente en un cableado que parece ser es muy viejo e Iberdrola tenía previsto cambiarlo a finales del 2018». Sin embargo, la firma «se ha comprometido a actuar en el primer trimestre». Por su parte, la portavoz del PP almenarense, Alicia Bañuls, pidió a la munícipe «depurar responsabilidades».