El Barri València fue la primera comisión fallera que cortó la vía pública, a última hora de ayer, para comenzar las tareas de montaje del jardín de la Cruz de Mayo. Oficialmente, es a partir de hoy miércoles cuando se pueden utilizar las calles y plazas para iniciar los trabajos previos, pero esta comisión ya viene solicitando un permiso especial desde hace dos años para comenzar una jornada antes porque de lo contrario no tendrán “tiempo suficiente” para construir el monumento.

Y es que hay unos tiempos que resultan difícilmente reducibles, entre los que destacan los de la construcción de las diversas balsas de agua que a menudo acompañan al jardín y contribuyen a ensalzar la belleza de la cruz.

El lucido y sellado y el posterior pintado o chapado precisan unos periodos para el secado entre una fase y otra y hasta la llegada del agua y, en el caso del Barri València, a todo ello hay que sumar la gran cantidad de metros cuadrados que se suelen utilizar tanto para el jardín del monumento grande como del pequeño.

EN DOS DÍAS // Las cruces, no obstante, no saldrán a la calle hasta ya caída la tarde del viernes e incluso a primeras horas de la noche, con el objetivo de que las flores --claveles naturales separados del tallo y colocados con la ayuda de palillos o alambres y colocados uno a uno-- estén en las mejores condiciones para que aguanten todo el fin de semana, aunque en eso va a depender en buena medida las condiciones climatológicas ya que la flor no beberá nada de agua a partir del momento en que sea puesta en la cruz.

El viernes por la tarde tendrá lugar la tradicional visita a la plantà y, a partir de las 8.00 horas del sábado, comenzará a pasar el jurado para puntuar los diferentes monumentos ubicados en los mismos emplazamientos en los que, en el mes de marzo, se levantan los monumentos falleros.

Este año, como novedad, la entrega de los diferentes premios tendrá lugar en la plaza que está anexa al lateral del Centre Municipal de Cultura la Mercé. H