Fin de semana eminentemente fallero en Benicarló, que arrancó ayer con el potente resonar de la despertà a cargo de las falleras mayores de la ciudad, Rosa Rillo y Noa Pegueroles, y que continuó por la tarde cuando la algarabía, el color, la música y la imaginativa y original puesta en escena de las 13 agrupaciones falleras inundaron las calles en la popular Cabalgata del Ninot.

Con un recorrido abarrotado de público, que dejó constancia del tirón que tienen las Fallas de Benicarló, la localidad recibió la visita de personajes singulares y esperpénticos, seres mitológicos, divinos y mundanos, e incluso algunos aplicaron la crítica más corrosiva con su particular visión de las noticias de actualidad. Desde la disputa entre el consistorio y el obispado de Tortosa en torno a la titularidad del campanario hasta la incapacidad de la clase política para formar el gobierno estatal fueron puestos en tela de juicio, en el que es una de las jornadas más divertidas del año.

Hoy, la familia fallera volverá a reunirse para asistir a la entrega de premios del Ninot Indultat y de las recompensas a los falleros más veteranos por su labor. H