La zombi más valenciana contará por primera vez con una falla inspirada en sus aventuras. La falla El Campanar de Benicarló ha decidido que todo su monumento infantil gire alrededor del juego de cartas valenciano La Fallera Calavera, un fenómeno que ya tuvo protagonismo este verano en la Gran Feria de Valencia y, por Todos los Santos, en el Museo Valenciano de Etnología.

Más de 20 personajes y objetos directamente surgidos de la baraja formarán un conjunto fielmente inspirado en la carta Falla descomunal, bien conocida por los jugadores de La Fallera Calavera. El monumento, que tendrá una altura aproximada de 2,5 metros, corre a cargo del artista benicarlando Daniel Ballester. Con 25 años de experiencia, Ballester fue precisamente quien propuso construir esta falla, al observar a miembros de la comisión divirtiéndose con el juego de zombis valencianos. El Campanar respondió positivamente a la sugerencia. «Nos gusta ser innovadores», aseguran desde la comisión, ya que el monumento apostará por el blanco y el negro, una gama cromática poco habitual en las fallas infantiles.

Ballester utilizará el modelado a mano a partir de corcho y estructuras internas de madera y buscará que el resultado sea lo más parecido posible al original. Los visitantes podrán encontrar personajes como la Delicà de Gandia, la Dama de Elche, las monleonetes o el capità Moro, pero en su versión zombi. Y todo ello surgirá de una gran paella, elemento vertebrador del juego en el que se inspira. El monumento dispondrá de un sistema de códigos QR que permitirá a los visitantes interactuar con el móvil para profundizar en la historia del juego.