Hace casi un año, Rocio, de 17 años, perdió la vida y su amiga Ivana se debatió entre la vida y la muerte. Ambas fueron arrolladas por un coche mientras esperaban el autobús en la parada situada en la avenida Magallanes de Benicarló, junto a la gasolinera BP. A punto de cumplirse el primer aniversario del trágico suceso, la alcaldesa, Xaro Miralles, anunció que se suprimirá dicha parada y la ubicada enfrente.

«Estamos redactando el proyecto para la adecuación de todo el bulevard de la antigua N-340, que contempla trasladar las dos paradas a las calles Puig de la Nao y Sénia», apuntó la primera edila. Miralles indicó que ya se han efectuado las mediciones sobre el terreno. «Se ha comprobado que hay espacio suficiente para instalarlas allí», apuntó la alcaldesa, que indicó que con esta actuación pretenden «aumentar la seguridad» y, a la vez, dar respuesta a las quejas del propietario del taller mecánico que tiene una de las paradas delante de su establecimiento «porque molesta e impide desarrollar con normalidad su actividad económica».