Todas las casetas que salieron a licitación en el recinto de fiestas de Benicàssim han sido adjudicadas, las 12. De nuevo, se ha repetido el pleno del año pasado cuando también se adjudicaron las 12, aunque finalmente renunció una y hubo 11. Más del doble que en los últimos años, pues en el ejercicio 2015 tan solo había cinco. Muestra evidente de que las fiestas están en auge.
El concejal de Fiestas, Arturo Martí, explicó que ahora los adjudicatarios tienen de plazo «hasta mediados de la próximo semana para presentar toda la documentación requerida o echarse atrás» si no quieren el puesto.
Este año se han presentado un total de ocho participantes --todos empresarios locales, salvo uno procedente de Orpesa--, de los cuales «hay tres que han cogido dos casetas», indicó Martí.
Los puestos salieron a licitación por un precio base de 500 euros. La puja más fuerte ha sido de 3.835 euros y la mínima, 707.
El montaje de las casetas del recinto, que se encuentra ubicado junto al paseo Pérez Bayer, se realizará el 11 y 13 de septiembre, para poder abrir de cara al fin de semana, aunque la inauguración oficial está prevista el sábado 16.
Las casetas tendrán una superficie de 50 metros y deberán tener todas las mismas características estéticas y de montaje. Además, podrán tener en su fachada frontal mesas y sillas.
Permanecerán abiertas al público a diario durante los 10 días de las fiestas de Santo Tomás, del 15 al 24 de septiembre, con horarios ininterrumpidos durante el día; y los horarios máximos determinados de las noches.
Los empresarios encargados de explotar las casetas deberán desmontar las carpas y dejar el espacio en perfectas condiciones, antes del día 27, tres días después de finalizar los festejos.
