Las obras de construcción de la rotonda del cruce entre la Gran Avenida Jaime I y la avenida Barcelona de Benicàssim ya han arrancado. En el punto se ha producido algún accidente mortal, por lo que era una actuación destacada. Es una de las intersecciones que registra más tráfico en temporada alta, al estar junto a la playa de l’Almadrava, un cámping, un supermercado y de camino al casco urbano y el Voramar.

Según explicó el concejal de Urbanismo en funciones del Ayuntamiento, Carlos Díaz, «facilitará la movilidad, dando fluidez al intenso paso de vehículos que soporta esta importante y peligrosa intersección todo el año». «Además, permitirá el giro a la izquierda a los vehículos que desde la Gran Avenida Jaime I pretenden incorporarse a la avenida Barcelona en sentido hacia el núcleo urbano, cuestión no permitida hasta la fecha y que generaba un grave problema de movilidad», indicó.

SECTORES // La intervención se ejecuta dentro de los trabajos de urbanización de las unidades de ejecución 16, 17 y 18, que se desarrollan en las inmediaciones de la futura glorieta, «que conectará con el nuevo vial que enlaza con el bulevar y que continuará próximamente hasta la futura entrada norte a Benicàssim desde la nacional 340», dijo el edil.

Las tareas comenzaron con las canalizaciones de agua y el alcantarillado. En cuanto estén terminadas, continuarán con la urbanización y las zonas verdes.

El objetivo es que las actuaciones puedan estar finalizadas, a ser posible, «antes del verano», informó Díaz, aunque, de no haber concluido por completo, se interrumpirán para no entorpecer la circulación en julio y agosto, y seguirían después de verano. «Se dejaría en la situación más avanzada posible y luego se acabaría de rematar», tal y como señaló.

La zona incluye, además, la creación de una parcela terciaria, en la que se podrá construir una tienda, bares u otros servicios.

En cuanto al desarrollo de las unidades 17 y 18, junto al cámping Bonterra, está en proceso de urbanización un vial perpendicular a la avenida Barcelona, que subirá hasta el antiguo trazado del ferrocarril, apuntó Díaz.

Respecto a las características, «será una calle muy ancha, similar a la de Carles Sarthou Carreres, con jardín central y aparcamiento a ambos lados, que llegará hasta el carril bici que enlaza con la vía verde», apuntó. En este proyecto se prevé la construcción de viviendas. Las obras dieron comienzo hace semanas, tras las actas de ocupación, el pago de terrenos expropiados y la emisión de la licencia de la actuación.