El Ayuntamiento de Benicàssim ya tiene finalizadas las obras de remodelación de las aceras en la calle Mestre Cubell, en confluencia con el vial Oliveres del casco urbano, con el fin de adaptarlas a las normas de accesibilidad recogidas en el plan de movilidad para personas con discapacidad.

Los trabajos, que se desarrollaron a lo largo de las últimas semanas, consistieron en la dotación de espacios con rebajes en las esquinas, de modo que faciliten el acceso de los viandantes con necesidades especiales.

El concejal de Obras, Clemente Martí, visitó los trabajos junto a la responsable de Servicios Sociales, Vanessa Batalla, para comprobar la conclusión de las tareas. El edil resaltó que con esta medida «vamos a mejorar la calidad de vida de mucha gente que circula por la calle y que, hasta ahora, tenía dificultades para subir y bajar de los bordillos». Añadió que en la trama urbana, «poco a poco, adaptamos todos los viales de la ciudad, con el fin de generar rutas que posibiliten una adecuada movilidad sin barreras».

REFORMAS / En el transcurso del presente año, el consistorio llevó a cabo una actuación de remodelación de aceras, que se encontraban en un estado de conservación deficiente, que supuso una inversión de 110.000 euros. La intervención incluyó la renovación de las áreas de paso para peatones de las calles Palmeral, Sigalero y en el barrio de Juan XXIII, así como en los viales de Font d’Arrufat y Font de la Teula.

Las labores se ejecutaron en un plazo de dos meses y concluyeron antes de la presente temporada estival. La iniciativa municipal contempló la supresión tanto de los pavimentos como de bordillos existentes, la mejora de los imbornales, la reconstrucción de las aceras y la reposición de los servicios como el alumbrado. La partida también incluyó, por parte de los operarios, el repintado de la señalización horizontal y los elementos de mobiliario urbano existentes en esta zona.