Benicàssim está ultimando la puesta en marcha de la fuente ornamental del ayuntamiento, que lleva más de una década en desuso. La actuación cuenta con una inversión de 18.000 euros. El concejal de Obras, Clemente Martín, contrastó con los técnicos que la estructura, que preside la escalinata de acceso al edificio, está prácticamente acabada. La empresa encargada de su gestión ha realizado las primeras pruebas de funcionamiento «con un buen resultado», según informaron desde el consistorio.

Los trabajos han consistido en la reconstrucción y adecuación de los cinco vasos de la fuente, la reparación total de los equipos hidráulicos y la instalación de equipos complementarios que permitirán que funcione con autonomía, reduciendo el coste de las tareas de mantenimiento.

Esta fuente fue uno de los elementos arquitectónicos que se incorporaron al nuevo ayuntamiento construido en el año 1972 por el arquitecto municipal Enrique Roca. Estuvo inutilizada durante más de una década por problemas de funcionamiento y filtraciones de agua, según recordaron desde el consistorio. «Ahora, por fin, ha sido restaurada totalmente y podrá funcionar dando de nuevo una imagen fresca y estética al acceso al ayuntamiento», añadieron desde el equipo de gobierno de Benicàssim. H