Benicàssim iniciará a final de año el plan de mejoras del recinto de festivales, tras la adquisición definitiva de los terrenos. El pleno de ayer aprobó, entre otros puntos, el proyecto definitivo de expropiación, con los votos a favor del PP, Cs y PSPV, en contra de Ara (Podem-EUPV), con la abstención de Vox y la ausencia de los 2 ediles de Compromís.

A partir de ahora el acuerdo tendrá un periodo de exposición pública y se procederá a la notificación de todos los propietarios para proceder al acta de ocupación y pago, tal y como explicó ayer la alcaldesa, Susana Marqués. Finalmente se han aceptado algunas alegaciones, tanto en cuanto a m2 como a precios.

Como adelantó este periódico, el consistorio pagará cerca de 16 euros por m2, en lugar de los 12 iniciales. Aún así, este precio por tasación conjunta no contenta a los dueños que lo ven insuficiente y ya avanzaron que buscarán amparo en el tribunal de expropiación. Aunque esto no paralizará ni alargará el proceso.

«Queda concluido así un procedimiento en el que llevamos trabajando desde principios de año y era un compromiso el poder consolidar esos terrenos, con la finalidad no solo de celebrar festivales, sino de adaptar el perímetro a las necesidades que Benicàssim necesita para poder llamar y captar la atención de promotores que quieran realizar eventos durante todo el año», dijo Marqués.

En octubre Iberdrola empezará con el desmontaje de las líneas de media y alta tensión «que están también vertebrando de forma innecesaria un recinto que tiene muchísimas más posibilidades sin que pasen esas líneas eléctricas», indicó la munícipe. Otro de los primeros pasos será contratar la redacción del proyecto de modificación de la zona con los 46.000 euros que se destinaron en el presupuesto de este año, como informó el edil del área, Carlos Díaz, que apuesta por trabajar para «tener el mejor recinto de festivales de España».

Y, cara al presupuesto del 2020, el Ayuntamiento «consignará ya partidas presupuestarias para adecuar estos terrenos, según lo que determine el proyecto que se está trabajando en consonancia con promotores y expertos de festivales para poder ubicar infraestructuras fijas y permanentes que permitan tener un recinto que resulte rentable», señaló Marqués. Algunas de éstas serán los «aseos, taquillas, módulos de oficinas, accesos, vallado, barreras acústicas en condiciones... que al no ser terreno municipal el consistorio nunca había podido invertir», apuntó.

Por su parte, Díaz añadió que tras 20 años alquilando estos terrenos, «era necesaria la adquisición definitiva ante la inseguridad de la negociación de los arrendamientos año tras año». H