Los trabajos para vallar el conocido como parque del Clot y acabar con el botellón en esta popular plaza de Benicàssim ya han comenzado. Con esta medida, el Ayuntamiento pretende evitar molestias vecinales a altas horas de la noche y ganar en seguridad, tras recibir numerosas quejas de ciudadanos residentes en esta zona.

Para ello, según explica el concejal de Urbanismo, Carlos Díaz, el consistorio ha destinado una inversión de 25.209 euros para cerrar este parque denominado Baix Maestrat y ubicado junto a la escuela infantil municipal Doloretes, muy próximo al casco urbano y al recinto ferial que suelen habilitar durante las fiestas.

Allí se suele concentrar un gran número de jóvenes, tanto durante la celebración de festejos como los fines de semana, con las consiguientes molestias vecinales por el ruido y actos vandálicos.

La intervención consiste en la colocación de una valla Hércules y se prolongará durante este mes de octubre, según Díaz. Una vez finalizados los trabajos, el parque se sumará al del Trenet y el ubicado en la calle Torre San Vicente, frente al polideportivo municipal, que tienen un horario de apertura y cierre establecido, que en otoño e invierno es de 10.00 a las 19.00 horas, mientras que en primavera y verano es de 9.00 a 22.00.

«Con el vallado de este espacio lograremos garantizar la seguridad y solventar molestias vecinales, ya que permanecerá cerrado por las noches, evitando con ello agrupaciones masivas de personas», destaca el edil, quien visitó ayer por la mañana las obras junto a la alcaldesa, Susana Marqués.

La primera edila benicense dice que el vallado del parque «forma parte del paquete de inversiones previstas para el presente ejercicio y que se verá complementado «con una actuación de jardinería con plantas autóctonas».

Presupuestos participativos

El rebaje de aceras en la Gran Avenida Jaime I, el vallado que separará el campo de fútbol del rocódromo y la futura pista de skate son otras de las iniciativas a ejecutar por parte del Ayuntamiento de Benicàssim procedentes de peticiones de la ciudadanía a través de los presupuestos participativos.