El Ayuntamiento de Benicàssim ultima los trámites para llevar a cabo la modificación de la ordenanza que permitirá que los perros puedan acceder a las playas en temporada baja, tal y como se acordó en una sesión plenaria. Todo indica que la renovada normativa podría entrar en vigor en otoño, tras la época estival.

Mientras tanto, los dueños de los canes todavía no están autorizados para acceder a las áreas litorales, tal y como indicaron desde el consistorio. Esto aclara la confusión que se había creado hasta el momento, ante la incertidumbre de muchos vecinos, que desconocían si ya estaba permitido o a partir de cuándo lo estará, tras las intenciones manifestadas por el Ayuntamiento.

La concejala de Sanidad, Vanessa Batalla, explicó que, desde el departamento que dirige, llevan trabajando durante este tiempo en los cambios del reglamento sobre animales domésticos, puntos que «ya están redactados».

Asimismo, el nuevo documento «se pasó a los técnicos y al edil de Playas. Queda pendiente culminar partes del texto, ya que hay que incorporar variaciones en dos ordenanzas, la de animales y la de playas», según apuntó la alcaldesa, Susana Marqués.

INFORMES // También faltará que el secretario municipal emita el informe jurídico necesario, para determinar que se cumple con la legislación y normativa vigentes, tal y como dijo la munícipe. Tras esta tramitación, deberá aprobarse, dentro del calendario anual de modificaciones ordenanzas, siguiendo un orden de prioridad.

Ante la proximidad de la campaña alta, la previsión es actualizar la ley para el próximo otoño. El objetivo es que puedan acceder los perros a cualquiera de las playas, pero en temporada baja, mientras se termina de decidir en qué zona del litoral concretamente se ubicará la playa canina, ya que la misma perdería probablemente la bandera azul.

De forma paralela, el Ayuntamiento impulsa una campaña de concienciación ciudadana sobre recogida de heces y limpieza de la orina en las farolas.