El Ayuntamiento de Benicàssim pedirá al Consell que tenga en cuenta las soluciones aportadas por la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) en el proceso de inclusión del humedal del Quadre de Santiago en el Catálogo de Zonas Húmedas, y solicitará que autorice la construcción de las motas que recomiendan los expertos para evitar las inundaciones en las viviendas próximas, afectadas en el área sur cuando se producen fuertes lluvias.

El concejal de Urbanismo, Carlos Díaz, indica que esta será una de las alegaciones que presentará el consistorio en el plazo de tres meses establecido para que los ayuntamientos presenten la documentación y sugerencias pertinentes que facilitarán la delimitación provisional de estos espacios. Y es que la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica ha iniciado el expediente de modificación del Catálogo de Zonas Húmedas para incluir siete nuevas áreas, entre las que se encuentran dos de la provincia de Castellón, la laguna de Sant Mateu y el Quadre de Santiago de Benicàssim.

Durante esta tramitación no podrán realizar en su ámbito territorial actos que supongan la transformación de la realidad física y biológica o la imposibilidad de cumplir con los objetivos de la declaración de espacio natural protegido. El objetivo es garantizar la conservación y el uso sostenible de los ecosistemas de la Comunitat Valenciana, con 48 zonas húmedas catalogadas.

Díaz insiste en la importancia de dar solución, por seguridad, a los problemas de inundaciones que afectan a alrededor de 800 viviendas. Tras descartar la opción de canalizar el barranco de la Parreta --el anterior proyecto que planteaban como solución, por resultar incompatible con la declaración del humedal como zona de especial protección--, la CHJ planteó otra alternativa. Esta consiste en la construcción de unos diques en los caminos Ratlla y Tamarits para mantener el agua dentro de la zona húmeda en un lago laminador. Lo que contribuiría a poner en valor el paraje y evitar que se produzcan inundaciones en el entorno. Tras un periodo de 10 o 15 días se iría sacando poco a poco al mar con la estación de bombeos.

Otra de las alegaciones será «que no consideren catalogable lo que ya está calificado como suelo urbano, que está reparcelado e inscrito en el registro de la propiedad y que se ciñan al suelo rústico», añade el concejal.