El alcalde de Betxí, Alfred Remolar, ha destacado en un balance el impulso inversor que el consistorio ha dado en el transcurso del 2017. Entre las obras efectuadas, ha mencionado el asfaltado del camino Vila-real, la remodelación de la piscina, la ejecución de la primera fase del Puntarró, la construcción de nuevos nichos en el cementerio, o los arreglos en diferentes viales. En cuanto a los equipamientos municipales, se han construido vestuarios masculinos en el polideportivo y se ha actuado en el edificio Esther Franch para uso asociativo.

Para el munícipe, «la buena gestión económica realizada en los últimos años ha provocado la disminución de la deuda en más de un 60%, al pasar de 4.186.0000 euros en 2011 a la cifra actual de 1.620.000».

En cuanto a una de las medidas más importantes de los últimos tiempos, la restauración del Palau, en este ejercicio ha culminado la segunda fase, con una dotación de 700.000 euros, de los que 600.000 han sido fruto de subvenciones. Remolar también ha hecho referencia a las nuevas contrataciones en diferentes áreas del consistorio y el traslado de la sede del centro de día. En cuanto a las perspectivas del 2018, incide en el desvío del tráfico pesado por fuera del municipio.