El consistorio de Betxí ha adquirido una cámara termográfica para poder controlar la temperatura de los usuarios en los espacios públicos, cuando así consideren oportuno. Se trata de un aparato de altas prestaciones que se puede conectar a un ordenador y a una distancia de más de un metro calcula la temperatura de las personas que se colocan frente a él.

La previsión es arrancar su uso en las mismas instalaciones del ayuntamiento para controlar los accesos. Igualmente, plantean su utilización en el auditorio, biblioteca o pistas deportivas.

«Trabajamos fuerte en los aspectos sanitarios y por ello adquirimos esta herramienta, para intentar frenar al covid-19», explica el alcalde, Alfred Remolar.