El Ayuntamiento de Borriol, que gobierna en minoría Compromís, advierte de la peligrosidad del estado semirruinoso de la Casa de Cultura, que en el último mes ha provocado un par de incidentes a causa de los desprendimientos que se han producido en una de las fachadas. De hecho, durante la pasada semana algunos bloques cayeron encima de diversos vehículos, a los que causaron desperfectos de diferente índole y la Policía Local tuvo que vallar el perímetro del edificio.

Por este motivo, el equipo de gobierno hace una «llamada a la desesperada a instituciones como la Diputación de Castellón, para hacer frente a esta obra faraónica diseñada en tiempos del PP, que está siendo una vergüenza para todo el municipio». Las advertencias del mal estado se remontan a la legislatura pasada. El alcalde, Héctor Ramos, afirma que «gracias a la negativa del PP y de Veïns, durante el anterior mandato se impidió pedir un proyecto de restauración a la Diputación» y ahora denuncian «un desamparo institucional con el agravante de que se ha invertido en numerosos pueblos castellonenses, pero jamás ningún gobierno provincial se ha preocupado por atender esta situación del municipio de Borriol».

El alcalde también lamenta que « arrasaron y destrozaron los antiguos lavaderos para construir una Casa de Cultura que nunca se ha hecho realidad, dejando un esqueleto de estructura en la principal arteria de comunicación, que ofrece una imagen lamentable del municipio».