El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Burriana (PSPV, Compromís y Se Puede Buriana) sacaron adelante los presupuestos municipales para el ejercicio 2017 con los votos en contra del PP, Cibur y Ciudadanos. Se trata de unas cuentas que descienden casi 150.000 € respecto a las de este 2016, en las que el montante económico se queda en los 26.904.403,7 euros.

No obstante, ahí no están contemplados los ingresos de alrededor de 400.000 euros previstos para el 2017 del plan Edusi, provenientes de la Unión Europea. El capítulo que más crece es el de las inversiones, un 61%, y en la parte contraria se sitúa el del endeudamiento, que está previsto reducirlo en un tercio, aproximadamente, y dejarlo alrededor del 30% a finales del próximo año, es decir, en 8,4 millones de euros (ahora está en 10,6 millones).

Entre las actuaciones previstas, destacar la finalización de los trabajos de la UE A30-31, en la Serratella, la expropiación de terrenos adyacentes a la carretera del Grao para hacer un carril bici y peatonal o la construcción de nuevos nichos en el cementerio municipal, en lo que será la última ampliación en el actual recinto.

personal // Por otra parte, el 20% del presupuesto se destinará a educación, cultura, deportes, sanidad, empleo y servicios sociales. En el apartado de personal, se gastarán alrededor de 150.000 euros en ampliaciones de horario laboral y de complementos específicos para los trabajadores y asistentes de Servicios Sociales.

La concejala de Hacienda del Ayuntamiento de Burriana, Cristina Rius, calificó los presupuestos del 2017 de «ajustados a las necesidades reales, pensando en la gente y, por eso, hemos destinado más dinero a empleo, movilidad y mejorado el departamento de Servicios Sociales».

oposición // El portavoz del PP, Juan Fuster, criticó que el equipo de gobierno cubre el gasto social «con los problemas de las personas, porque suben el recargo de apremio de 190 a 250 euros y un 14% los intereses de demora», detalló. «Esto demuestra el engaño de su lema de rescatemos a las personas», remarcó el concejal popular de Burriana.

Mariola Aguilera, de Cibur, por su parte, indicó que resulta «triste» que, pese al cambio de equipo de gobierno, «no se pueda apoyar el presupuesto por lo mismo que no se apoyaba a otros partidos». «Muestran incongruencias, como bajar 40.000 euros el convenio de recaudación de multas, pero suben 15.000 euros para enganches de grúa. Es un presupuesto cuadrado a martillazos», criticó.

Por último, María Jesús Sanchís, de Ciudadanos, justificó su voto negativo a las cuentas al asegurar que no son «presupuestos de futuro sino de gasto».