El Ayuntamiento de Burriana ha comenzado a paralizar el cobro del impuesto de la plusvalía en la compraventa de inmuebles a aquellas personas que alegan que no se ha producido tal lucro, sino que se ha perdido valor en la operación, es decir, que han vendido por debajo del precio de adquisición del inmueble.

Se trata de una decisión que llega más de medio año después de que comenzaran a aparecer sentencias que daban la razón a las personas que se habían visto afectadas por este supuesto. Además, así lo ha venido reclamando el PP de Burriana en los últimos ocho meses, pero no ha sido hasta ahora cuando se ha dado la orden a los funcionarios de «suspender temporalmente» la liquidación de este impuesto.

TARDANZA // El portavoz de los populares burrianenses, Juan Fuster, asegura que la tardanza en la resolución «puede suponer que quienes vendieron algún bien hace cuatro años hayan perdido ya la oportunidad de reclamar la devolución de lo abonado».

Hasta la fecha, se han invocado compraventas con beneficios negativos que supusieron en su momento liquidaciones impositivas por importe de unos 550.000 euros, la mayoría de ellas por operaciones cerradas durante el presente ejercicio del 2017.

Con la paralización del cobro de este tributo, que afecta únicamente a las personas que voluntariamente alegan que han tenido ingresos negativos por este concepto, lo que se pretende desde el Ayuntamiento es evitar que, en el futuro, tenga que devolverse el dinero antes recaudado.

Las reclamaciones empezaron a presentarse tras la sentencia del Tribunal Constitucional en la que se anulaban dos artículos de la ley que regula el impuesto.