El Ayuntamiento de Burriana estudia cambiar su posición respecto a la rescisión del agente urbanizador en el PAI Golf Sant Gregori para darle viabilidad. Desde la aprobación provisional de quitar dicha condición a Urbanizadora Golf Sant Gregori ha llegado una sentencia desfavorable que obliga al consistorio a pagar 11.000 euros por el adelanto de la denominada cuota 0.

Estas resoluciones son las primeras consecuencias de la citada rescisión que, aunque no es firme por no haber resuelto el recurso de reposición del urbanizador, los juzgados de primera instancia hacen valer cara a los propietarios afectados.

Las consecuencias pueden ser las indemnizaciones millonarias que el Ayuntamiento tendría que abonar no solo a los dueños, sino al propio agente urbanizador. Los últimos cálculos realizados por la recientemente creada Asociación de Propietarios a Favor de Sant Gregori estiman en unos 200 millones de euros, muy por encima de los 10 del aval de la empresa urbanizadora, lo que conllevaría poner en grave peligro las arcas municipales.

Para intentar desbloquear el ambicioso proyecto urbanístico, el consistorio negocia con un nuevo urbanizador para que el proyecto urbanístico más importante de la historia de la localidad pueda ejecutarse.

reunión // Representantes de la firma se reunieron ayer con la corporación municipal, el presidente del colectivo de propietarios, Enrique Daudí; el administrador concursal y miembros del despacho de abogados Garrigues para presentarles su propuesta cara a desarrollar este plan tan ambicioso, que se presentó hace ya 16 años. La condición principal que solicita el gobierno local es que se respeten en su totalidad los derechos existentes de los propietarios, lo cual es asumido por la nueva mercantil.

El acuerdo, que se encuentra en negociaciones, abre la puerta a evitar también el impacto negativo del Plan de Acción Territorial de la Infraestructura Verde del Litoral (Pativel), que obligaría al Ayuntamiento, si en cinco años no se ha desarrollado el plan, a que las parcelas pasaran a rústicas, con lo que sería el fin de un proyecto que puede situar a Burriana en un referente del turismo de playa y golf.

De igual modo, la imposibilidad de conseguir un nuevo aval de 10 millones de euros debido a la coyuntura económica actual, tanto por el Ayuntamiento, si asumiera la gestión directa, o por un nuevo urbanizador, si se sacara de nuevo a concurso, son también condiciones que juegan a favor de la continuidad del agente urbanizador, objetivo que persigue el equipo de gobierno.

El único trámite pendiente para empezar las obras es la concesión, por parte de Costas, al Ayuntamiento para las obras de regeneración del frente litoral.