Burriana mira al cielo justo cuando alcanza el ecuador de las fiestas patronales en honor a la Mare de Déu de la Misericòrdia. Aún restan por celebrarse otras actividades y, además, la mitad de las exhibiciones taurinas preparadas para este año. Entre ellas, la de Nubarrón, el más popular de cuantos astados se han soltado en las calles de la capital de la Plana Baixa. La Comissió del Bou incluso ya ha preparado un plan alternativo por si tienen que suspender alguna tarde o noche alguno de los eventos taurinos.

Mientras, durante la jornada de ayer de nuevo los morlacos fueron los protagonistas de las celebraciones. Se lidiaron dos toros por la tarde. El primero de ellos, que se soltó desde la plaza de El Pla, perteneció a la ganadería de Torreherberos y estuvo patrocinado por la Penya El Bou És lo de Menos, que aportó un ejemplar negro bragado, fuerte y entregado en el juego.

El segundo, desde la plaza de El Pla, de la ganadería Ave María, patrocinado por la peña Les Bourrianeres. Justo antes de la suelta, frente al toril, se le entregó la camiseta de esta asociación a J. L. Violeta, el vecino de esta localidad que sufrió una grave cogida el año pasado, por un toro patrocinado por esta misma organización. Un bonito y emotivo homenaje que sirvió de prolegómeno para la suelta del segundo astado de la tarde. En este caso, una res muy entregada, que dio juego a los rodaors y que no paró de rematar hasta el final del espectáculo en los cadafals.

La jornada de hoy // También está previsto durante el día de hoy que, si el tiempo lo permite, los toros sean los protagonistas de la jornada festiva. Ayer llovió en un par de ocasiones, pero esto no desanimó a los allí presentes, que siguieron animando la cita taurófila. La Penya de Penyes patrocinará un astado y también se podrá disfrutar de otros dos toros más, -uno por la tarde y otro por la noche- sendas reses son aportadas por el Ayuntamiento.