El Ayuntamiento de Burriana ya ha abierto el tercer sobre --con propuesta económica-- del concurso público para la adjudicación de un total de 18 puestos estivales que se emplazarán desde este verano en la zona marítima. De ellos, finalmente han quedado cubiertos 14 y, por lo tanto, en breve el consistorio volverá a sacar a licitación los cuatro que han quedado vacantes.

De todos ellos llama la atención uno que se asienta sobre la arena y cuyas dos pujas que se habían ofrecido por él fueron descartadas por parte de los técnicos, ya que todo apuntaba a un posible «fraude de ley» por coincidencia de administrador.

Por otra parte, los otros tres puestos ya habían quedado desiertos al no haberse presentado ninguna oferta por ellos.

Respecto a los merenderos, cabe señalar que un mismo empresario ha pagado 16.000 euros por dos de los puestos, lo que supone 8.000 por cada uno, casi el doble de lo que se paga habitualmente. Además, uno de estos puestos quedó desierto pero ha habido también un gerente habitual que se ha quedado sin zona para poder montar, un hecho similar a lo que le sucedió a un empresario que pretendía instalar una atracción de feria. Cabe mencionar que este año pujaron tres mercantiles para dos puestos.

CINCO VERANOS // Este concurso público se extiende a los próximos cinco veranos, aunque las mercantiles tendrán que ir renovando año a año la concesión.

Otros de los aspectos a tener en cuenta es que los chiringuitos que se asientan en terreno municipal deberán mover la pantalla acústica para desplazarla unos metros hacia la carretera que une el Grao con el puerto. Serán unas labores que correrán a cargo de los propios adjudicatarios de los recintos pero que, por el contrario, les servirá para no depender de los metros que permite Costas, ya que no ocuparán dominio público marítimo terrestre.