El castillo-palacio de Beatriz Borgia de Castellnovo está convirtiéndose en el objetivo preferencial en la agenda del equipo de gobierno de este municipio, que encabeza Carmina Gil.

Los contactos para llevar a cabo actividades y, de manera especial, para encontrar fondos con destino a inversiones en esta fortaleza, única de sus característica en toda la comarca, se repiten constantemente. Fruto de ello es la inclusión de Castellnovo en la llamada Ruta de los Borgia y el interés que desde diferentes administraciones públicas se muestra por el proyecto.

Ahora ha sido la subdelegada del Gobierno en Castellón, Soledad Ten, la que, tras reunirse con la alcaldesa y la técnico municipal, Santa Morro, se ha mostrado interesada en hallar nuevas líneas de financiación para consolidar las estructuras que todavía quedan en pie de la fortaleza y, de esta forma, frenar su deterioro y evitar que desaparezca.

El castillo de Castellnovo se sitúa sobre la loma de San Cristóbal y su origen se atribuye a los romanos, aunque fueron los musulmanes cuando, en el siglo XII, dejaron patente la arquitectura islámica. Tras pasar por varias manos, en el siglo XV pasó a manos de Beatriz de Borgia, época en la que el palacio alcanzó su máximo esplendor.

Esta característica es la que influyó en que, hace algo más de dos años, la entonces Agència Valenciana de Turisme --ahora Turisme Comunitat Valenciana-- incluyera este castillo y al municipio de Castellnovo en la Ruta de los Borgia, una iniciativa lanzada para impulsar y difundir este producto «singular» en la oferta turística autonómica.