El concejal de Cultura y Patrimonio en el Ayuntamiento de Cabanes, Carles Mulet, informó ayer de que ya se ha mantenido una primera reunión con los propietarios de la parcela en la que se encuentran los restos del Castell de Miravet, del poblado islámico exterior y de la mezquita, «en la que estos han manifestado su interés por ceder todo el conjunto arquitectónico en ruinas al consistorio, para que puedan iniciarse los trámites para recuperar este enclave».

Según explicó Mulet, los dueños «han anunciado la cesión desinteresada de la parte de la parcela afectada, una vez delimitada la zona de los yacimientos». Mientras, desde el equipo de gobierno aseguran mantener contactos con diferentes administraciones «para valorar y afrontar este reto», de manera que pronto puedan «tener una propuesta».

«Para este ejecutivo local progresista, recuperar este espacio sería un revulsivo para el turismo cultural de la comarca, por lo que hemos pedido la implicación de la Diputación y de la Conselleria de Cultura, pues entendemos que es una actuación a muy largo plazo que supera las posibilidades de nuestro municipio», subrayó Mulet. H