La pareja formada por Mara López Esteller y Álex Roca Octavio fueron aclamados ayer como máximos dignatarios de la falla el Campanar de Benicarló. Ambos recibieron los atributos que les confieren los cargos de falleros mayores de la entidad josefina que preside Manolo Martín Sánchez.

Inseparables y felices, los flamantes representantes de la familia campanera no ocultaron su gozo al asumir tan alto rango. Y es que la pareja no estará sola en su reinado. Compartirá el desempeño de las funciones propias del cargo asumido con sus homólogos infantiles, Elsa García Serrat y Julen García Arrufat.

El traspaso de cargos también se materializó con la imposición de bandas a las reinas del Foc, cargos que recayeron en Carolina Gellida Belmonte y, en categoría infantil, en la niña Sara Martín Rodríguez.

Dos damas ostentan el madrinazgo. Se trata de Zaira Valls Artesero, como madrina de la falla; y Andrea Molina Gil, que ejerce de madrina del estandarte.

Completó el cuadro de honor el mantenedor, Rubén Arrufat. En su discurso, ensalzó los valores que adornan a los nuevos representantes y recordó momentos entrañables vividos en el seno de la agrupación josefina.

El acto, conducido por Maria Violat y Carmen López, estuvo ambientado en una bodega. No en vano, la falla el Campanar cuenta en su haber con numerosos premios que constatan que en su casal se sirve la mejor mistela, bebida indispensable en las celebraciones josefinas.

Agradable y emotiva fue la sorpresa que se llevaron las dos parejas de falleros mayores cuando sus hermanas y amigas subieron al escenario y les dedicaron bonitas palabras llenas de cariño.