El Gobierno de España activó el 31 de diciembre pasado el decreto por el que se establece el reglamento de dominio público hidráulico. La norma causó inquietud entre los propietarios del área de Cap i Corb, en Alcalà de Xivert, ante la posibilidad de que las expectativas de urbanizar se redujeran más tras la tramitación del Pativel desde la Generalitat.

Sin embargo, una de las conclusiones de un informe encargado por el Ayuntamiento establece que esta zona no tendrá nuevas afecciones, puesto que la normativa valenciana en materia de inundabilidad, el Patricova, ya contempla unas cortapisas que el decreto estatal apenas amplía. Nacho Rubio, uno de los autores del estudio, recordó que, según el plan de la Generalitat, «un 40% de la superficie urbanizable de Cap i Corb está fuera de riesgo». Y en el caso de tener que edificar en este entorno, «se deberá hacer un análisis para concentrar las zonas verdes en el área de riesgo y construir en el resto».

Donde sí que se contemplan mayores cambios es en el núcleo de Alcalà, en las inmediaciones del Barranquet y la Rambla. En esos casos, el Patricova ya especificaba que los planes urbanísticos estaban sujetos a medidas de recanalización. La norma estatal, por su parte, detalla limitaciones para la ubicación de equipamientos del tipo de centros de enseñanza o de salud o espacios de gran acumulación de gente, como superficies comerciales.

«Con este encuentro abierto a la gente hemos querido hacer lo mismo que con el Pativel, para tratar de resolver dudas», indica el alcalde, Francisco Juan.