Dotar a la carretera del puerto de Burriana de acera y carril bici supondrá una inversión máxima de 960.000 euros y será sufragado a partes iguales por ambas administraciones. Así se establece en el protocolo que firmarán la Generalitat y el Ayuntamiento, y que la corporación municipal aprobará el próximo lunes en sesión plenaria.

De este modo, la actual vía, que tiene un carril para cada sentido de circulación, con un ancho de 3,5 metros y unos arcenes de 2,5 metros de amplitud, pasará a tener una zona reservada para bicicletas y peatones con un ancho de 6,3 metros. Se construirá en el margen izquierdo de la vía, en sentido al mar, de forma que la circulación de vehículos se desplazará hacia el lado contrario de la calzada (la derecha en dirección al mar), ensanchando la carretera hasta los actuales postes del tendido telefónico.

La plataforma para bicis y viandantes se logrará reduciendo el ancho de los carriles de circulación que existen en estos momentos y ampliando la calzada entre 0,8 y un metro.

La actuación, a la que se ha denominado Construcción de una ciclo ruta con paseo peatonal, unirá el casco urbano de Burriana “y sus instalaciones portuarias en paralelo a la CV-1852”, según se explica en el documento. Será la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio la encargada de aportar los 480.000 euros de la Administración autonómica. La obra afectará a 2,2 kilómetros del trazado de la carretera del puerto y tiene como finalidad “mejorar la seguridad de los peatones y ciclistas”. Aun así, el protocolo no da plazos para la ejecución de los trabajos, aunque se asegura que se acometerán “con la mayor colaboración y celeridad posibles”.

En el reparto del proyecto, la Generalitat construirá el vial para peatones y ciclistas, a la vez que plantará una línea de arbolado y pintará y señalizará esta zona. Mientras, el consistorio asumirá la instalación de un bordillo y arbustos para la protección de la ruta y pondrá a disposición del Consell el terreno requerido.

oposición // El proyecto no gusta al PP. Su portavoz, Juan Fuster, considera que la solución planteada es “poco ambiciosa”, por lo que reclama abordar una actuación en varias anualidades. Asimismo, lamenta que se lleve a pleno un protocolo del que no conocen “plazos de ejecución ni compromisos de financiación”.

Por su parte, la portavoz de Cibur, Mariola Aguilera, rechazó el plan y auguró que la actuación “incrementará los problemas de tráfico y dejará pobre la conexión con la zona marítima”. H