Transcurrido un mes desde el levantamiento del estado de alarma, los últimos días han estado marcados por las cifras disparadas de contagio por coronavirus, a consecuencia del brote de Peñíscola, con 59 afectados, y que tiene por origen la discoteca de la localidad. Previamente se dieron a conocer otras situaciones con origen familiar o laboral, sobre todo el ocurrido en Castelló a partir de una celebración de San Juan, con 35 positivos.

Por el momento, esta preocupante evolución --hay quien habla ya de segunda oleada-- no tiene grandes efectos en el sistema sanitario. Según la última actualización de la Conselleria de Sanidad, esta nueva fase se afronta con un escaso número de personas hospitalizadas, 13, y sin nadie ingresado en unidades de cuidados intensivos (UCI). La mayor parte de estos afectados son asintomáticos o tienen un cuadro leve. Si se observa la evolución de este mes, el pico fue los días 15 y 16, con 18 atendidos en los hospitales. Y solo en dos ocasiones hubo gente en UCI.

Yendo más atrás en el tiempo, el 24 de mayo (en plena fase 1 de la desescalada en el conjunto de la provincia) había prácticamente los mismos ingresados, 14, pero los pacientes en cuidados intensivos fueron cuatro. Hace justo tres meses, el 27 de abril, eran 94 los hospitalizados y 15 los atendidos en UCI. Y el 30 de marzo, cuando la emergencia adquirió su mayor ferocidad, los números eran, respectivamente, de 213 y 37.

PRECAUCIONES / Pese a estas comparaciones, las autoridades han redoblado en las últimas jornadas su exigencia en el cumplimiento de las normas de prevención. Muestra de ello fue la obligación de llevar la mascarilla por la calle, o la declaración institucional formulada el sábado por el presidente de la Generalitat, Ximo Puig. En lugares como Cataluña ya se aprecia la presión asistencial tras la continua evolución de los rebrotes, y el confinamiento vuelve a ser un concepto de uso común por parte de los expertos.

Lo que ocurra en las próximas semanas será clave. Mientras tanto, está dispuesto el hospital de campaña junto al General de Castelló, en el caso de que los nuevos positivos requieran de ingreso.