El disparo de un castillo de fuegos artificiales supuso el punto final a las fiestas de Alcossebre, que desde el miércoles han animado la parte final de la temporada veraniega en este núcleo costero. La última jornada contó con diversas actividades para todas las edades, como una batalla de paintball y sendos talleres de risoterapia y manualidades.

Los jubilados celebraron a mediodía su comida de hermandad, mientras que el recinto taurino acogió la exhibición de ganado, a cargo de la ganadería de Iván Meseguer de Cervera. Por la noche, el grupo Alcozancos protagonizó un espectáculo de fuego. H