Xilxes vive con intensidad la recta final de las fiestas patronales en honor al Santísimo Cristo de la Junquera. Anoche, unos 2.000 vecinos se congregaron en la plaza Juan Pablo II para disfrutar de la tradicional cena de carn de bou, en la que cada peña o grupo de comensales tuvo su mesa para pasar una gran velada.

El alcalde, José Martínez, junto con el concejal de Fiestas, José Manuel Navarro, estuvo en todo momento pendiente de que todo transcurriera tal y como estaba previsto. Cada colectivo fue pasando por el punto preparado para recoger su ración de carne. Tras la cita gastronómica, el toque musical lo protagonizaron la orquesta Marengo y una discomóvil hasta altas horas de la madrugada, con alta participación y ganas de pasarlo bien.

En el último fin de semana de celebraciones, hoy se realizará una de las propuestas tradicionales con el almuerzo de botifarres i llonganises, acto de hermandad que también tendrá lugar en la plaza Juan Pablo II. Será una buena excusa para coger fuerzas para una completa jornada.

Por la tarde, llegará el momento de encarar los últimos espectáculos taurinos de las presentes fiestas patronales, con la exhibición de dos ejemplares de las ganaderías Moreno de Silva y Conde de la Maza. Por la noche, se desarrollará una embolada con un toro del hierro de Miguel Parejo.

NORMALIDAD // El edil de Fiestas manifestó, a falta del balance definitivo, que «la semana de festejos está transcurriendo sin ningún sobresalto» y esperan «que en los eventos que restan del programa los peñistas y vecinos sigan disfrutando tal y como lo han estado haciendo durante todas las jornadas festivas».