Cerca de un centenar de puestos de venta acuden, semanalmente, al mercado de invierno extraordinario que se instala cada sábado desde mediados de octubre en la playa de Moncofa. Una propuesta que inició su andadura en el 2016 y que cada vez cuenta con más vendedores interesados en ofrecer sus productos a vecinos y visitantes. Además, la desaparición de la cita de los domingos en Mascarell no ha hecho más que suscitar un mayor interés en la que se impulsa en la localidad.

Esta iniciativa se enmarca dentro de la campaña para desestacionalizar la zona marítima planeada por el Ayuntamiento y se ha convertido en un atractivo que repercute muy positivamente en los comercios y bares de la zona de la playa. Desde el consistorio se espera que el efecto sea aún mayor este segundo año, incrementando el negocio y empleo en este punto gracias a su consolidación. El alcalde del municipio, Wenceslao Alós, ha destacado que «la gran aceptación que tuvo el año pasado la prórroga del mercado estival durante el invierno, donde de forma continua montaron unos 80 expositores de distintos productos como alimentos, complementos del hogar y cocina, ropa o mercería, este año se ha visto aumentada, lo que ha favorecido que se dinamice y potencie económicamente la zona marítima durante los meses invernales y ha consolidado el mercado de la playa como un referente a nivel comarcal».