Una empresa especializada de ámbito nacional, contratada por el Ayuntamiento de Benicàssim, supervisa el estado del arbolado de gran envergadura de la localidad. Los expertos revisan ejemplares de grandes dimensiones, como los eucaliptos de Ferrandis Salvador, de los que se desprendieron varias ramas en verano; así como las palmeras de Jorge Comín; y los árboles de Villa Elisa, entre los que se encuentra un ficus monumental.

La alcaldesa, Susana Marqués, informó de la realización de este estudio y explicó que «los servicios municipales realizan de manera constante una vigilancia del arbolado, pero era necesario hacer un análisis en profundidad que garantice el buen estado de los ejemplares o las medidas a tomar si existe alguna carencia».

«Las caídas de ramas ocurridas este verano fueron fortuitas, como determinaron los informes por lo acontecido pero, en cualquier caso, queremos anticiparnos a que pudiera volver a suceder», señaló la munícipe.

La intervención que ahora se lleva a cabo consiste en la realización de una evaluación visual y análisis instrumental para detectar posibles defectos internos y asociarlos a una determinada peligrosidad, con el fin de adoptar medidas y mejoras necesarias en el mantenimiento del arbolado.

Para realizar el estudio, se utiliza una plataforma elevadora de 16 metros que permite a los especialistas acceder a las zonas altas de los ejemplares. Con todos los datos, se desarrollará un informe global. Los resultados se mostrarán clasificados en una ficha de campo donde, además, se describen las recomendaciones previstas, que pueden llegar al arrancado, en los casos muy graves.