Peñíscola continúa con la promoción de su condición de ciudad-plató a través de la simulación de distintos rodajes en varios puntos del casco antiguo. Ayer, de nuevo, la iniciativa organizada por el Ayuntamiento de la Ciudad en el Mar, a través de la Concejalía de Turismo --que propone a vecinos y visitantes convertirse en actores-- no defraudó y tuvo una masiva participación, aunque en todo momento se cumplieron las limitaciones que conlleva el protocolo de seguridad sanitaria establecido en la lucha contra el covid-19.

Sin embargo, si todas las representaciones que se están llevando a cabo durante el puente de octubre tienen una temática especial, la de ayer, además de estar dedicada al cine histórico, tuvo una doble vertiente añadida. Por un lado, y coincidiendo con los fechas en las que la Comunitat celebra su día grande, tuvo un cariz reivindicativo con la representación de la Conquista de Valencia; y, por otro, subyacía la impronta nostálgica del recuerdo del rodaje en Peñíscola de una de las superproducciones americanas que fue del todo mítica en su época: El Cid.

La película, que se estrenó en 1961, supuso todo un hito para los vecinos de la ciudad amurallada y de la comarca, a la vez que catapultó a este municipio del litoral castellonense como un magnífico escenario para el mundo del séptimo arte. Por aquel entonces, se calcula que unas 2.000 personas participaron en el film, que tuvo al famoso Charlton Heston como principal protagonista. De hecho, si el personaje al que encarnó, el Cid, conquistó València; no cabe duda que Heston conquistó Peñíscola y el idilio fue recíproco.

Espacios de película

En el épico largometraje, la batalla de la conquista de València tuvo como escenario la playa Norte; pero ayer el rodaje se situó en la plaza de toros. Sin embargo, el cambio de localización no hizo mella en los eventuales actores y actrices que, en todo momento, pusieron las mismas ganas que aquellos que representaron la escena hace más de medio siglo.

Bajo las órdenes del director, Luis Leal, de Legend Especialistas, varios voluntarios representaron las tropas moras y cristianas en distintas tomas y, aunque Jimena brilló por su ausencia, el Cid, a lomos de Babieca, y empuñando su Tizona, llevó a su ejército hacia la victoria emprendiendo la subida hacia la batería del Calvario, mientras el público seguía atento la recreación de la hazaña e inmortalizó el momento captando imágenes con sus teléfonos móviles de última generación.

Solo un detalle marcó la diferencia entre aquellos figurantes de la década de los 60 y los actuales, y es que los yelmos que protegían los rostros de los bravos guerreros han sido sustituidos por mascarillas multicolor. Cosas de la pandemia del coronavirus.

Más acción

Mientras, hoy continúan los pases y escenificación de rodajes que, en esta ocasión, giran en torno a Peñíscola de Cine Fantasía heroica. A mediodía se rodará El ataque de los demonios; y a las 18.30 horas, El bárbaro y el dragón. Las escenas representarán, con todo tipo de detalles, escenas icónicas de guerra y fantasía heroica. El último pase será mañana lunes, 12 de octubre, y tendrá lugar a las 12.00 horas, con El desembarco de los bucaneros.