Orpesa volvió a rendir homenaje a los turistas con un impresionante castillo de fuegos acuático que iluminó por la noche la playa de la Concha. Miles de personas (calculan que más de 8.000) vibraron ante el gran espectáculo pirotécnico organizado.
Una cita que ya es tradicional en el municipio, con el nombre de la Fiesta del Mar. Se realiza por la importancia que el turismo tiene para la localidad, que recibe a miles de visitantes en verano, “en un acto de agradecimiento, a los que vienen y veranean aquí”. “Pasamos de una población de 9.500 habitantes durante el año, a unas 130.000 personas en los días fuertes de agosto”, destaca el alcalde de la localidad, Rafael Albert.
La fiesta de anoche la protagonizó Pirotecnia Tomás de Benicarló, que llegaba de ser la que sumó más votos populares en Pamplona, en el concurso de fuegos de San Fermín. Ofreció un gran espectáculo que se alargó más de 20 minutos con momentos muy intensos.
Los participantes se agolparon en el paseo marítimo y algunos presenciaron el lanzamiento de fuegos desde barcas en el mar. Los bomberos controlaron que no pasara nada y los servicios de limpieza actuaron en la zona al finalizar la actividad. El evento se repetirá a mediados de agosto en el conocido como Día del Turista. H
