En el año 2013 un vecino de la Vall d’Uixó conocido popularmente como Angelillo, fue detenido por supuestas amenazas y maltrato animal a raíz de unos videos que emitía a través de su canal de Youtube. Ayer comenzó el juicio contra un hombre que ha llegado a protagonizar una campaña de recogida de firmas pidiendo su exoneración y que cuenta con el apoyo de diferentes organizaciones e incluso de concejales del Ayuntamiento, que consideran, como él mismo defiende, que aquellos videos «no eran más que parodias», llegando a describirlo como alguien «inofensivo».
Tras la primera sesión del juicio oral en Castellón, Ángel Blasco no quiso realizar declaraciones, a la espera de la resolución del magistrado que se encarga de su caso. Piden para él 4 años de cárcel.
En octubre del 2019, respaldado por una agrupación política con representación en el municipio, organizó una charla informativa para exponer públicamente su situación. Juzgado como un hombre «desequilibrado y peligroso», él mismo lamentó haber sido víctima de un «linchamiento público» que podría llevarle a prisión.
