La aparición de ejemplares de carabelas portuguesas en días casi consecutivos, en playas de Vinaròs, Nules y Moncofa, ha evidenciado la disparidad de criterios a la hora de activar los protocolos de emergencias por la presencia en la costa de animales considerados como potencialmente peligrosos.

No son pocas las voces que apelan a establecer un mecanismo conjunto, supramunicipal, que indique, sin margen a la interpretación, cuáles son los pasos más recomendables a dar en estas circunstancias. Así lo manifestó el alcalde de Nules, David García, tras conocer que unos niños de su localidad habían encontrado una muestra de esta venenosa especie. «Todo lo que sea establecer protocolos por parte de especialistas me parece bien», indicó, el primer edil, quien añadió que, de este modo, «todos actuaríamos de una manera coordinada».

En la actualidad, como confirmaron desde el Ayuntamiento, fían la decisión al criterio de la empresa responsable del servicio de vigilancia de la playa, que no aconsejaba prohibir el baño si antes no aparecían, como mínimo, dos ejemplares. En otros municipios valencianos, como explicaron desde Emergencias, se iza la bandera que alerta sobre la presencia de medusas, para que los bañistas extremen las precauciones. También se actúa de manera distinta dependiendo de si el animal está vivo o muerto.

En lo que todos coinciden es en la advertencia de no tocarlas y avisar a los socorristas.