La cementerio municipal de Almassora ha acogido esta mañana la prueba práctica entre 14 de los 15 aspirantes que superaron el examen escrito para acceder a la bolsa de operario del camposanto. La prueba ha arrancado puntual a las 9.00 horas bajo la supervisión del tribunal encargado del proceso de selección. El examen ha consistido en dos ejercicios prácticos para valorar la destreza de los candidatos, que optan a una plaza de enterrador cuyo salario es de 1.673,01 euros brutos mensuales.
En primer lugar, los aspirantes han realizado uno a uno un simulacro de exhumación e inhumación en uno de los pabellones del recinto. Posteriormente, divididos en tres grupos, cada uno de ellos ha tenido que romper la tapia de ladrillo de un nicho y volverlo a construir con los materiales facilitados por el consistorio. Los funcionarios encargados de supervisar la prueba han entregado a los candidatos las herramientas y material de obra necesarios para que realizaran ambas pruebas.
El tribunal valorará la capacidad de resolución de los aspirantes, una prueba a la que hoy se han presentado 14 de los 15 inscritos que superaron la fase inscrita. Estos 13 hombres y una mujer aspiran a encabezar la bolsa de trabajo para necesidades de personal temporal con la categoría de operarios de cementerio municipal. Los 10 candidatos mejor puntuados durante los ejercicios de hoy se someterán en adelante a una entrevista curricular. La persona con mejor puntuación ocupará la plaza que quedó vacante por jubilación al finalizar 2016.
El tablón de anuncios municipal informará del avance del proceso a medida que el tribunal disponga de las notas y convoque la siguiente fase. Todo ello tiene lugar después de que los aspirantes se sometieran a la prueba escrita, obligatoria y eliminatoria, el pasado 18 de enero. En aquella ocasión el examen se dividió en dos partes: un cuestionario con cinco preguntas cortas a desarrollar y la resolución escrita de dos casos prácticos.
Como constaba en las bases aprobadas en su día y publicadas en el Boletín Oficial de la Provincia, el examen incluyó cuestiones relacionadas con el callejero de Almassora, la ordenanza municipal de cementerio, el reglamento de policía sanitaria mortuoria de la Comunitat Valenciana, así como cuestiones relacionadas con jardinería, albañilería e informática -entorno Windows y correo electrónico-.
