El colectivo Compromís per Benicàssim ha impugnado los presupuestos de este año y ha denunciado que incluyen partidas que “suponen un sobrecoste para las arcas públicas difícilmente justificable”. Así lo ha manifestado el portavoz nacionalista en el consistorio, Joan Bonet, que ha puesto como ejemplo “la moda de contratar servicios, a través del renting, una práctica que ha hecho, que en ocasiones, se tripliquen e incluso los costes, si se comparan con los precios de mercado”.

En este sentido, Bonet ha destacado la adjudicación de la gestión de la piscina municipal. Según el edil, “además de que pagamos 207.000 euros cada año, no hay ningún mecanismo de control que nos permita saber si ese precio es excesivo o no”. Asimismo, Bonet critica que a la empresa concesionaria “se le ha permitido abrir un gimnasio y un bar con terraza sin pagar nada por ello, lo cual supone una competencia desleal para otros establecimientos”.

SOBRECOSTES // El portavoz de Compromís ha puesto otros ejemplos del “despilfarro” del gobierno local, “como los sobrecostes en la compra del césped artificial del campo de fútbol, que ha costado el triple de lo que estaba presupuestado” o los homenajes a turistas, “que suponen un gasto de 50.000 euros y que no tienen incidencia ”. H