El concejal de Patrimonio de Peñíscola, Jorge Rovira, muestra su repulsa por las pintadas aparecidas en las murallas, a la altura del entorno de la Porteta, como informó días atrás Mediterráneo. Por ello, anuncia que preparan un refuerzo de la vigilancia en la zona y barajan la idea de restringir el paso para evitar que estos daños vuelvan a suceder. El edil indica que deben evaluar los costes para el borrado, pero «podrían ser elevados». B. Roig