Uno de los principales indicadores de la salud turística de un municipio, la cantidad de consultas efectuadas en las oficinas de información, salvó el tipo en Peñíscola el año pasado, con unas 140.000 visitas atendidas. Esto supone un descenso de cerca del 1% respecto a un 2017 de récord y una bajada menor a la sufrida en otros parámetros, como la ocupación hotelera.

El concejal de Turismo, Rafael Suescun, muestra su satisfacción por los datos y destaca «la cantidad de consultas registradas en los meses de verano, con una media de 900, y jornadas concretas en las que se alcanzaron las 1.200». Uno de los meses con mejor comportamiento fue septiembre, ya que en el transcurso de las fiestas patronales contabilizaron una media de 1.000 visitas.

MERCADOS FORÁNEOS / Yendo al detalle de estos números, el edil incide en el avance de los visitantes que acudieron a las oficinas procedentes del extranjero, con el aumento de un 1%. Franceses, ingleses y alemanes son tres de los colectivos en los que Peñíscola cuenta con una asistencia más fiel, al optar tanto por la modalidad de alojamiento de los hoteles como las ofertas de cámpings y apartamentos turísticos.

El nuevo año traerá novedades al modelo de atención al visitante del municipio, con la finalización de las obras de la nueva oficina, situada en las dependencias del Centro de Estudios. Los trabajos de remodelación del espacio han acabado, «por lo que en breve estará en marcha» este recinto, que complementará al existente en el paseo marítimo.