La Dirección General de Costas ha iniciado esta semana unos trabajos en la cala del paraje natural de Sòl de Riu de Vinaròs, en el litoral norte de la localidad, que ha sufrido varios desprendimientos importantes desde el pasado mes de julio que han afectado incluso a la zona de tránsito. Las tareas se centran en el reacondicionamiento del acantilado de la playa, mediante la eliminación de las cuevas y grietas que se han formado y el acopio de las grandes rocas desprendidas en la pared para protegerla de temporales. También se está realizando una nueva rampa que permitirá el acceso a la cala a los bañistas, dejando de nuevo la playa practicable. Además, se dispondrá una valla de madera de protección en lo alto para la gente que pasea por este entorno natural.

VALORES AMBIENTALES / El principal problema de este punto es que se trata de un espacio con importantes valores ambientales, por lo que no se puede desarrollar ningún tipo de proyecto que frene la regresión. Además, es una cala sin accesos públicos acondicionados y solo se cuenta con un camino que se podría llegar a retranquear si se llegara a un acuerdo con el propietario.

Con todo, fuentes cercanas a la obra aseguran a este diario que se podría ejecutar una acción más profunda a tres bandas --Gobierno central, autonómico y local--.

El edil de Obras y Servicios, Guillem Alsina (PSPV) visitó ayer por la mañana estas intervenciones. «Agradecemos a Costas estos trabajos porque más vale tarde que nunca, pero aún no es suficiente», indicó Alsina. En este sentido, recordó las actuaciones que cree prioritarias en la zona sur. «Esperemos que intervengan pronto en el tramo de Salines y Cala Puntal, que son entornos donde el temporal causó grandes daños y ya representan un riesgo para las personas», señaló.

Sin embargo, según ha sabido Mediterráneo, desde hace unos meses, desde el Ayuntamiento no han contactado con Costas.