Cruz Roja de Nules se ha visto obligada a abandonar los terrenos en los que hace apenas unos meses puso en marcha su proyecto de huertos urbanos solidarios, como consecuencia del cambio de opinión de la familia que en su día cedió la gestión de esta parcela al Ayuntamiento.

La noticia llegó de forma repentina e inesperada hace unas semanas, cuando tanto la oenegé como el consistorio recibieron una notificación en la que se les informaba de que los propietarios del solar revertían su decisión de cederlo porque, según ha podido saber Mediterráneo, el uso final del mismo no se correspondía con el que plantearon los autoridades municipales en el momento de firmar el acuerdo.

Al parecer, según se recoge en el escrito donde se notifica «en tiempo y forma» la ruptura del pacto, desde el consistorio se les comunicó que su intención era crear en el espacio un parque canino. Cuando Cruz Roja planteó al equipo de gobierno la posibilidad de ubicar sus propios huertos urbanos, se consideró que estos terrenos, que están ubicados junto a los que gestiona el consistorio, estaban en la zona idónea.

A partir de ese momento, se firmó un nuevo contrato con la entidad humanitaria que se concretó poco después con el adecentamiento y preparación del suelo para poder ser cultivado. Se valló el perímetro y se adjudicaron las parcelas, una docena. De inmediato, los beneficiarios comenzaron a plantar. Con las mini-fincas en producción, se entregó la notificación que fue recibida con «sorpresa» por todas las partes.

Según el presidente de Cruz Roja, Vicent Nebot, ya se están buscando alternativas aunque, de momento, esperan no tener que dar por perdido todo lo que se había plantado, atendiendo a que esos productos tienen una finalidad social, al destinarse al banco de alimentos de la oenegé