Las obras de la plaza de la Sinagoga de Onda finalizarán esta semana «tras cuatro años de bloqueo que reactivó en junio el equipo de gobierno de Carmina Ballester», según fuentes municipales. Llegado el fin de obra, el consistorio asume los arreglos de los desperfectos que han causado los trabajos en las casas de los vecinos durante todo este tiempo.

Se trata de un compromiso que adquirió la alcaldesa con los vecinos, tras escuchar sus quejas y malestar por tener un enorme agujero en frente de sus puertas, y que ahora se cumple. De esta forma, están llevando a cabo trabajos de pintado en las fachadas colindantes a la obra que se vieron afectadas, así como de chapado de azulejo, entre otros. «Los vecinos han sufrido una pesadilla durante mucho tiempo y por fin van a disfrutar de la plaza que merecen», apuntó Ballester tras visitar los trabajos junto al edil de Ordenación del Territorio y Vivienda, Juan López.

una plataforma // El proyecto es todo un reto de la ingeniería al proponer la creación de una plataforma de madera sobre una parte de la Sinagoga, que podrá ser transitable, mientras que la parte de abajo, donde se encuentran los restos medievales, podrá ser visitada accediendo desde una rampa. El coste total de la actuación es de 400.000 euros.